Miel

La miel procede de las abejas, a partir del néctar que recogen de las flores de las plantas en el campo.  Para producir  medio kilogramo de miel, las abejas necesitan hacer entre dos millones y dos millones y medio de viajes (6 556 abejas recorren uno y un tercio de la circunferencia de la Tierra)

La miel se compone principalmente de 16 tipos de azúcares siendo dos los predominantes: La LEVULOSÁ (fructosa) y la DEXTROSA (glucosa).  Esto es uno de los motivos por los que la miel actúa tan rápidamente produciendo energía, puesto que estos dos elementos se describen como "PREDIGERIDOS", por lo cual cuando entran en el cuerpo y son asimilados, comienza a actuar directamente. Debido a su alto valor energético y a su facilidad de digestión es un alimento especialmente valioso para los ancianos y los niños mayores de un año.

Al mismo tiempo que la miel de abeja tiene la capacidad de endulzar 25 veces más que la azúcar ordinaria,  también es considerada como uno de los alimentos más nutritivos que se conocen por su contenido de vitaminas, sales minerales y azúcares de fácil digestión.